Para innovar hay que acabar la burocracia
Jaime Polanco es Director General de estrategia y desarrollo corporativo del Grupo Prisa. Combina muy bien el uso de los dos hemisferios cerebrales. Mezcla la lógica y lo racional con lo intuitivo y lo emocional. Fórmula que le ha permitido cosechar abundantes frutos.
¿Cuáles son los pilares de su estilo gerencial?
Soy metódico, meticuloso y puntual. Además, me gusta rodearme de gente creativa e inteligente que asuma responsabilidades y tome decisiones. Y le hago un seguimiento muy cercano a los asuntos pendientes.
¿Qué herramientas gerenciales emplea con mayor frecuencia?
Uso una combinación -según las circunstancias, pero la más importante es la dirección estratégica (dedico mucho tiempo a definir muy bien los objetivos y luego a darle línea a la organización para poder alcanzar dichas metas).
¿Cómo distribuye su tiempo?
Tengo responsabilidades directivas, ejecutivas, institucionales y una muy importante -la de crear alianzas.
¿Cuál es la clave para manejar bien su agenda?
La flexibilidad para adaptarse a las necesidades del momento. Además, uno debe poder abrirles espacio a asuntos imprevistos y tiene que encontrar tiempo para hablar informalmente con sus colaboradores.
¿Cómo es su proceso de toma de decisiones?
Promuevo la participación activa de todos los miembros de mi equipo, leo y escucho con gran atención tanto opiniones internas como externas, investigo con profundidad la realidad y las tendencias de los medios de comunicación en diversos lugares, y analizo con cuidado el entorno en el que operan nuestros negocios. Después de hacer esto, tomo las decisiones.
¿Qué busca al momento de seleccionar a los miembros de su equipo?
Que sean personas independientes, que no teman equivocarse, y que disfruten intensamente su oficio. Además, que sean serios, cuidadosos con las instancias y respetuosos de los procesos.
¿Cuáles han sido las principales lecciones que ha aprendido de sus errores y de sus aciertos?
De mis equivocaciones, que la impaciencia cuesta. Y de mis logros, que vale mucho la pena comprender bien el entorno. Leer bien el presente y el futuro del entorno, captar los cambios y las diferencias entre un lugar y otro, y entender los códigos (el funcionamiento) de cada país me ha producido buenos dividendos.
¿Cómo detecta oportunidades?
Mi método es más intuitivo que científico, pero parto de una abundante recolección de datos. Y la intuición se desarrolla dándole rienda suelta a la curiosidad, viajando mucho, observando con rigor, escuchando atentamente, con los cinco sentidos muy despiertos.
¿Qué hay que hacer para impulsar la innovación?
En el mundo de los negocios hay dos clases de personas: los administradores y los innovadores. Desafortunadamente son más los burócratas que los que piensan y actúan como verdaderos empresarios. Esto hay que cambiarlo para que la innovación florezca.
¿Qué consejo le da a un joven profesional que está iniciando su carrera?
Lo más importante es que sea intrépido. También le recomendaría convertirse en un experto en el área en la que quiera desarrollarse, que sea constante, y que se divierta en el trabajo.
¿Qué deben hacer las universidades para mejorar la formación de los futuros emprendedores y ejecutivos?
Deben acercarse más al mundo empresarial, para conocer mejor su actividad cotidiana y poder así elevar la calidad de la educación que le dan a sus estudiantes. Las universidades son laboratorios que deberían experimentar más con la realidad de los negocios, deberían ser cómplices en el propósito de fortalecer la buena formación de los profesionales del futuro.
¿Cuál es su definición personal de liderazgo?
Un líder es un agente de cambio positivo, que transmite eficazmente ideas y sentimientos para movilizar la gente hacia metas valiosas.
¿A qué líderes admira y por qué?
Del ámbito político, a Bill Clinton por su frescura y su habilidad para comunicarse con la gente, y al ex presidente Felipe González por haber sido el gran artífice de la transición de la España antigua a la moderna. Del ámbito empresarial, a Bill Gates y a Carlos Slim, porque además de haber construido empresas fenomenales, han hecho grandes obras de filantropía.
RASTRO. Jaime Polanco estudió economía en Nueva York, donde además obtuvo una especialización en finanzas internacionales. Inició su carrera en el Banco del Progreso, en España, y cuatro años más tarde ingresó a la empresa holding del Grupo Prisa. Allí se desempeñó como Director financiero. Luego fue nombrado Administrador Delegado de la comercializadora de medios de Prisa, posición que ocupó hasta el año 99. Posteriormente trabajó como Consejero Delegado de todas las actividades de entretenimiento de Prisa y después como Consejero Delegado de Prisa Internacional. Hace poco fue designado Director General de estrategia y desarrollo corporativo del Grupo Prisa -empresa que factura más de 3 mil millones de euros al año, con operaciones en 22 países y una nómina de 12 mil personas.
Mauricio Rodríguez Múnera, Portafolio.
¿Cuáles son los pilares de su estilo gerencial?
Soy metódico, meticuloso y puntual. Además, me gusta rodearme de gente creativa e inteligente que asuma responsabilidades y tome decisiones. Y le hago un seguimiento muy cercano a los asuntos pendientes.
¿Qué herramientas gerenciales emplea con mayor frecuencia?
Uso una combinación -según las circunstancias, pero la más importante es la dirección estratégica (dedico mucho tiempo a definir muy bien los objetivos y luego a darle línea a la organización para poder alcanzar dichas metas).
¿Cómo distribuye su tiempo?
Tengo responsabilidades directivas, ejecutivas, institucionales y una muy importante -la de crear alianzas.
¿Cuál es la clave para manejar bien su agenda?
La flexibilidad para adaptarse a las necesidades del momento. Además, uno debe poder abrirles espacio a asuntos imprevistos y tiene que encontrar tiempo para hablar informalmente con sus colaboradores.
¿Cómo es su proceso de toma de decisiones?
Promuevo la participación activa de todos los miembros de mi equipo, leo y escucho con gran atención tanto opiniones internas como externas, investigo con profundidad la realidad y las tendencias de los medios de comunicación en diversos lugares, y analizo con cuidado el entorno en el que operan nuestros negocios. Después de hacer esto, tomo las decisiones.
¿Qué busca al momento de seleccionar a los miembros de su equipo?
Que sean personas independientes, que no teman equivocarse, y que disfruten intensamente su oficio. Además, que sean serios, cuidadosos con las instancias y respetuosos de los procesos.
¿Cuáles han sido las principales lecciones que ha aprendido de sus errores y de sus aciertos?
De mis equivocaciones, que la impaciencia cuesta. Y de mis logros, que vale mucho la pena comprender bien el entorno. Leer bien el presente y el futuro del entorno, captar los cambios y las diferencias entre un lugar y otro, y entender los códigos (el funcionamiento) de cada país me ha producido buenos dividendos.
¿Cómo detecta oportunidades?
Mi método es más intuitivo que científico, pero parto de una abundante recolección de datos. Y la intuición se desarrolla dándole rienda suelta a la curiosidad, viajando mucho, observando con rigor, escuchando atentamente, con los cinco sentidos muy despiertos.
¿Qué hay que hacer para impulsar la innovación?
En el mundo de los negocios hay dos clases de personas: los administradores y los innovadores. Desafortunadamente son más los burócratas que los que piensan y actúan como verdaderos empresarios. Esto hay que cambiarlo para que la innovación florezca.
¿Qué consejo le da a un joven profesional que está iniciando su carrera?
Lo más importante es que sea intrépido. También le recomendaría convertirse en un experto en el área en la que quiera desarrollarse, que sea constante, y que se divierta en el trabajo.
¿Qué deben hacer las universidades para mejorar la formación de los futuros emprendedores y ejecutivos?
Deben acercarse más al mundo empresarial, para conocer mejor su actividad cotidiana y poder así elevar la calidad de la educación que le dan a sus estudiantes. Las universidades son laboratorios que deberían experimentar más con la realidad de los negocios, deberían ser cómplices en el propósito de fortalecer la buena formación de los profesionales del futuro.
¿Cuál es su definición personal de liderazgo?
Un líder es un agente de cambio positivo, que transmite eficazmente ideas y sentimientos para movilizar la gente hacia metas valiosas.
¿A qué líderes admira y por qué?
Del ámbito político, a Bill Clinton por su frescura y su habilidad para comunicarse con la gente, y al ex presidente Felipe González por haber sido el gran artífice de la transición de la España antigua a la moderna. Del ámbito empresarial, a Bill Gates y a Carlos Slim, porque además de haber construido empresas fenomenales, han hecho grandes obras de filantropía.
RASTRO. Jaime Polanco estudió economía en Nueva York, donde además obtuvo una especialización en finanzas internacionales. Inició su carrera en el Banco del Progreso, en España, y cuatro años más tarde ingresó a la empresa holding del Grupo Prisa. Allí se desempeñó como Director financiero. Luego fue nombrado Administrador Delegado de la comercializadora de medios de Prisa, posición que ocupó hasta el año 99. Posteriormente trabajó como Consejero Delegado de todas las actividades de entretenimiento de Prisa y después como Consejero Delegado de Prisa Internacional. Hace poco fue designado Director General de estrategia y desarrollo corporativo del Grupo Prisa -empresa que factura más de 3 mil millones de euros al año, con operaciones en 22 países y una nómina de 12 mil personas.
Mauricio Rodríguez Múnera, Portafolio.
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