Desde Bahía hasta Fortaleza
Un mundo de mil caras, de los bares flotantes de Maceió y la agreste belleza de Pipa a los magníficos atardeceres de Jericoacoara.
Cada uno con su particularidad, son muchos y variados los destinos de la costa nordestina. Desde Porto Seguro en el sur del estado de Bahía hasta Fortaleza, la promesa de mar cálido, cocoteros, arenas claras y sol caliente se cumple sin solución de continuidad. En la clásica ciudad de Salvador, con su fuerte impronta cultural resumida en su casco histórico; en la tranquila villa de pescadores de Praia do Forte; en los salvajes paisajes de Pipa, cerca de Natal; en las piscinas naturales de Maceió. Además de una amplia oferta de vuelos regulares a estos destinos, desde el 6 de enero habrá vuelos especiales a Porto Seguro, Salvador y Maceió, incluidos en paquetes turísticos. A continuación, cómo son los principales sitios nordestinos.
PORTO SEGURO
En el litoral bahiano, 730 kilómetros al sur de Salvador, Porto Seguro resume lo más buscado del verano en Brasil: naturaleza, buenas playas y movida nocturna. Consolidado desde hace varias temporadas como destino favorito de los argentinos que contratan paquetes para viajar al nordeste, ofrece la agitada peatonal conocida como "Pasarela do Alcool" y también un colorido casco histórico de 1526. Rodeados de paisajes paradísíacos playas surcadas por ríos que desembocan en el mar y una verdísima mata atlántica Porto, Arraial d'Ajuda y Trancoso, playas vecinas, tienen todo para asegurar una estadía placentera.
SALVADOR
El Pelourinho, su célebre centro histórico, es caminado por turistas de todo el mundo, al igual que sus 50 kilómetros de playas. Salvador no tiene desperdicio: su bella arquitectura de los siglos XVI, XVII Y XVIII da marco a una intensa vida cultural que el viajero palpa inmediatamente a través de la gastronomía y la música bahianas. Las mejores playas urbanas son las del norte: desde Itapuá hasta Flamengo. Y hay paraísos cercanos a la ciudad, como Morro de San Pablo (al sur, en la isla de Tinharé), la isla de Itaparica y, 70 km hacia el norte, las perlas de la llamada Linha Verde, Praia do Forte y Costa do Sauipe.
MACEIO
Las piscinas naturales formadas por arrecifes de coral son la marca registrada de Maceio capital de Alagoas y sus alrededores, destino que cada año gana más adeptos y, por ende, crece. Este verano inaugura un hotel 5 estrellas con sistema all inclusive, el resort Miramar Maragogi. Los argentinos tendremos disponibles, en enero y frebrero, vuelos directos, especiales, desde Buenos Aires, realizados por la compañía Andes para llegar a las playas de Maceió. Flanqueadas por cocoteros, las más visitadas son Jatiúca ideal para surfear, Ponta Recife con piscinas naturales y Paju»cara, de donde parten las ya típicas jangadas (embaraciones rústicas) hacia los bares flotantes en el mar. La perla de la región, Maragogi y sus arenas blancas, está casi en el límite con el estado de Pernambuco,
RECIFE
La capital de Pernambuco y mayor ciudad del Nordeste brasileño tiene sus mejores playas al norte y al sur de su casco urbano, bellamente surcado por canales. Porto de Galinhas (a 60 kilómetros al sur de la ciudad) es un encantador pueblo de pescadores con 12 kilómetros de arenas blancas y mar transparente. En el litoral sur brilla Cabo de San Agostino, con su mar verde y un entorno de máxima tranquilidad. Pegada a Recife está Olinda, ciudad colonial con bellísimas iglesias, caserones y conventos, en la que se celebra el tercer carnaval más importante de Brasil.
NATAL
Aunque las playas de la llamada "Ciudad del Sol" no son para despreciar, Natal tiene su paraíso a unos 80 kilómtros al sur: Pipa, un apacible pueblo de pescadores enmarcado en un entorno salvaje y bello. Entre las 11 playas de este santuario ecológico, las más conocidas son Praia do Amor enmarcada por abismales acantilados que mueren en su mar bravío, adorado por surfistas y la Bahía de los Gofinhnos, alejada del centro del pueblo y rodeada de mata atlántica. En esta extensa playa es posible nadar entre delfines. En Pipa hay muchas posadas, la mayoría con piscina y decoradas con muy buen gusto. Un paseo imperdible, al norte de Natal: paseo en buggy por las dunas de Genipabu.
FORTALEZA
La capital del estado de Ceará es uno de los destinos brasileños más visitados por los europeos. Como las playas urbanas no son aptas para el baño, los viajeros en busca de mar se dirigen a las dunas de Cucumbo (a 27 km) y a Morro Branco (a 85 km), playa con un particular paisaje de acantilados de arena petrificada, de distintas tonalidades. Ahora, lo verdaderamente imperdible está a unas siete horas de viaje (en ómnibus y jeep) desde Fortaleza y es Jericoacoara, playa de ensueño que convoca a aventureros y románticos convocados por los atardeceres únicos en la duna.
Cada uno con su particularidad, son muchos y variados los destinos de la costa nordestina. Desde Porto Seguro en el sur del estado de Bahía hasta Fortaleza, la promesa de mar cálido, cocoteros, arenas claras y sol caliente se cumple sin solución de continuidad. En la clásica ciudad de Salvador, con su fuerte impronta cultural resumida en su casco histórico; en la tranquila villa de pescadores de Praia do Forte; en los salvajes paisajes de Pipa, cerca de Natal; en las piscinas naturales de Maceió. Además de una amplia oferta de vuelos regulares a estos destinos, desde el 6 de enero habrá vuelos especiales a Porto Seguro, Salvador y Maceió, incluidos en paquetes turísticos. A continuación, cómo son los principales sitios nordestinos.
PORTO SEGURO
En el litoral bahiano, 730 kilómetros al sur de Salvador, Porto Seguro resume lo más buscado del verano en Brasil: naturaleza, buenas playas y movida nocturna. Consolidado desde hace varias temporadas como destino favorito de los argentinos que contratan paquetes para viajar al nordeste, ofrece la agitada peatonal conocida como "Pasarela do Alcool" y también un colorido casco histórico de 1526. Rodeados de paisajes paradísíacos playas surcadas por ríos que desembocan en el mar y una verdísima mata atlántica Porto, Arraial d'Ajuda y Trancoso, playas vecinas, tienen todo para asegurar una estadía placentera.
SALVADOR
El Pelourinho, su célebre centro histórico, es caminado por turistas de todo el mundo, al igual que sus 50 kilómetros de playas. Salvador no tiene desperdicio: su bella arquitectura de los siglos XVI, XVII Y XVIII da marco a una intensa vida cultural que el viajero palpa inmediatamente a través de la gastronomía y la música bahianas. Las mejores playas urbanas son las del norte: desde Itapuá hasta Flamengo. Y hay paraísos cercanos a la ciudad, como Morro de San Pablo (al sur, en la isla de Tinharé), la isla de Itaparica y, 70 km hacia el norte, las perlas de la llamada Linha Verde, Praia do Forte y Costa do Sauipe.
MACEIO
Las piscinas naturales formadas por arrecifes de coral son la marca registrada de Maceio capital de Alagoas y sus alrededores, destino que cada año gana más adeptos y, por ende, crece. Este verano inaugura un hotel 5 estrellas con sistema all inclusive, el resort Miramar Maragogi. Los argentinos tendremos disponibles, en enero y frebrero, vuelos directos, especiales, desde Buenos Aires, realizados por la compañía Andes para llegar a las playas de Maceió. Flanqueadas por cocoteros, las más visitadas son Jatiúca ideal para surfear, Ponta Recife con piscinas naturales y Paju»cara, de donde parten las ya típicas jangadas (embaraciones rústicas) hacia los bares flotantes en el mar. La perla de la región, Maragogi y sus arenas blancas, está casi en el límite con el estado de Pernambuco,
RECIFE
La capital de Pernambuco y mayor ciudad del Nordeste brasileño tiene sus mejores playas al norte y al sur de su casco urbano, bellamente surcado por canales. Porto de Galinhas (a 60 kilómetros al sur de la ciudad) es un encantador pueblo de pescadores con 12 kilómetros de arenas blancas y mar transparente. En el litoral sur brilla Cabo de San Agostino, con su mar verde y un entorno de máxima tranquilidad. Pegada a Recife está Olinda, ciudad colonial con bellísimas iglesias, caserones y conventos, en la que se celebra el tercer carnaval más importante de Brasil.
NATAL
Aunque las playas de la llamada "Ciudad del Sol" no son para despreciar, Natal tiene su paraíso a unos 80 kilómtros al sur: Pipa, un apacible pueblo de pescadores enmarcado en un entorno salvaje y bello. Entre las 11 playas de este santuario ecológico, las más conocidas son Praia do Amor enmarcada por abismales acantilados que mueren en su mar bravío, adorado por surfistas y la Bahía de los Gofinhnos, alejada del centro del pueblo y rodeada de mata atlántica. En esta extensa playa es posible nadar entre delfines. En Pipa hay muchas posadas, la mayoría con piscina y decoradas con muy buen gusto. Un paseo imperdible, al norte de Natal: paseo en buggy por las dunas de Genipabu.
FORTALEZA
La capital del estado de Ceará es uno de los destinos brasileños más visitados por los europeos. Como las playas urbanas no son aptas para el baño, los viajeros en busca de mar se dirigen a las dunas de Cucumbo (a 27 km) y a Morro Branco (a 85 km), playa con un particular paisaje de acantilados de arena petrificada, de distintas tonalidades. Ahora, lo verdaderamente imperdible está a unas siete horas de viaje (en ómnibus y jeep) desde Fortaleza y es Jericoacoara, playa de ensueño que convoca a aventureros y románticos convocados por los atardeceres únicos en la duna.
2 comentarios
Morocha -
Morocha - Fortaleza Pacotes Turisticos
Paquetes a Maceio -